Hace un tiempo, me llegó -por distintas partes- el rumor que el saqueo interno de originales, en una editorial de historietas, no se reducía a algunas tiras sueltas de autoría de colaboradores menores, como siempre se hizo, sino que estaba alcanzando ya a auténticos clásicos realizados por el propio fundador.
El dato me produjo bastante indignación, que volqué -a raíz de una pregunta que me formularon- en el post "Ladrones de originales y coleccionistas"(VER), donde expliqué el mecanismo de fraccionamiento de esas obras para comercializarlas.
Pero como no acostumbro a quedarme con una única versión, seguí investigando.
Luego de mucho andar, obtuve otra información, y de fuente muy fidedigna: no se trataría de hurto de originales, sino de falsificación.
El cerebro de la operación sería un pillo que trabaja en dicha editorial. Muchos lo conocen bien: declama su admiración incondicional al prócer, mientras que por izquierda ha negociado durante décadas ejemplares en su propio beneficio.
Claro que esas cotizadísimas revistas no se las vende a cualquiera, sino a revendedores o a contados coleccionistas con mucha guita y desesperados por tener en sus estantes "las de kiosco".
A los primeros sólo les interesa la rentabilidad, o sea que no van a andar deschavando por ahí de donde consiguen el material. Y a los segundos, basta amenazarlos con cortarles el chorro para asegurarse su silencio al respecto.
Además, el revelar la procedencia de esas joyitas, implicaría darles a otros la posibilidad de obtenerlas, con lo que perderían exclusividad.
Pero las pilas de ejemplares, luego de décadas de robo hormiga, habrán empezado a mermar escandalosamente. Y en forma inversamente proporcional, a crecer el riesgo que el dueño de la editorial, que aunque mucho no se ocupa, por fin se avivara.
Y eso podría traer aparejado, además, el descubrimiento de la desaparición de algunos originales (también obra de nuestro pillo), lo que es aún más grave.
Advertiría el perdulario que la impunidad podía estar llegando a su fin, y que corría peligro de ser despedido sin indemnización (pobre, estando tan cerca de jubilarse!). Eso, en el mejor de los casos. En el peor, le podía caer encima una causa penal.
Habría sido entonces que, no resignándose a perder su principal fuente de ingresos, vislumbró otro filón, menos arriesgado.
Los coleccionistas que tenían ya en su poder cuanta revista se hubiera editado, y con estado "de kiosco", seguían ávidos. Cual sedientos Dráculas, reclamaban originales. "Acaso mi plata no vale?", le espetaban con los ojos saliéndose de las órbitas.
"Cómo complacerlos sin que me vaya en ello la cabeza?", se habrá preguntado nuestro pillín.
De ese interrogante a pergeñar el fraude había solo un paso.
Bastaba conseguir un dibujante virtuoso, que fuera de confianza, para encargarle la reproducción de planchas originales.
La cuestión del envejecimiento no sería un problema. Se guardan en los depósitos de la editorial toneladas de cartón antiguo, del que se usaba para hacer las tiras. Y nadie se va a andar fijando si faltan.
Conociendo el prontuario del truhán en cuestión, la versión suena muy creíble.
Seguramente, se habrá planteado: "Si se ha encarado con éxito la falsificación de Van Gogh, Cézanne y Picasso, para hablar sólo de algunos maestros modernos, cómo no va a poder hacerse con mi idolatrado X -llamémosló así- , por más inimitable que yo lo crea?"
Sin duda, este pillo sabe que la mayoría de los coleccionistas de historietas no tienen la menor idea de dibujo y se tragan cualquier cosa.
Es más, ni siquiera se plantean la posibilidad del fraude, dado que basta para ellos, como signo inequívoco de autenticidad, la procedencia de la propia editorial.
Uno anda por tribunales, y sabe que sin pruebas no se puede decir más que ésto.
Pero creo que es suficiente como alerta para coleccionistas boludos.
A mí, en realidad, me alivia saber que la obra de "X" no anda por ahí mutilada.
Aunque respecto a la fauna, me da un poco de lástima.
Ya no se trata de cuestiones éticas lo que planteo, muchachos.
Se trata de que no tiren la plata al pedo.
Si quieren una buena réplica, se puede conseguir por mucha menos guita de la que están garpando.
Y en cuanto a la exclusividad, tampoco ahora la están teniendo, así que...
Yo aviso. Ustedes, hagan lo que quieran.
(PD: si quieren comentar, comenten, pero no diré una palabra más al respecto)
Señor dao:
ResponderBorrarestoy leyendo su blog ,me parece un poco fundamentalista su punto de vista en algunas cosas.
Ahora veo que de una manera poco educada le piden saque una imagen de Nippur en su inicio.
¿¿No es una contradicción tenerla??
Dao:
ResponderBorrarNo me dejes con la intriga: el universo de posibles opciones es muy grande.
Al menos tirá algo, cualquier cosa,una línea mas no sea para pescar por Santa Fe.
ResponderBorrartodos savemos quienes benden las cosas truchas y solo un "NIÑO" no se daria cuenta
ResponderBorrarSeñor Anónimo de 4:31 PM: Yo de pibe iba a un grupo juvenil en la iglesia, capitaneado por curas tercermundistas.Una de las pocas cosas que me quedó de esa época es: "O fríos o calientes, a los tibios Dios los vomita". En todo caso, mi fundamentalismo se relaciona con la teoría del exabrupto de Tato Pavlovsky. Le menciono esta cita que hice porque Ud. me dice que está leyendo mi blog, lo cual no tomo al pie de la letra. Sería una tarea que no recomendaría a nadie. Por eso lo remito, para contestarle lo de Nippur, al post del concurso (http://historietas---cine---teatro-por-dao.blogspot.com/2007/11/gran-concurso-gran.html), que ha pasado desapercibido en medio de tanta polémica. No tiene gracia que yo explique el chiste.
ResponderBorrarElmer y Anónimo de 4:49 (que parecen ser el mismo): Vos tenés todas las líneas, por lo que veo. Pero yo no recomiendo pescar en esas aguas. Están muy contaminadas.
Mentiroso: tu alusión parece estar vinculada más a mi post anterior ("Ladrones...) que a éste. Este es mucho más específico. (Mejorá la ortografía, hermano! de onda te lo digo)
Quién se crees que es?
ResponderBorrarYo le escribi con buena onda.
Se equivoca.
no nesesito mejorar nada gil
ResponderBorrarno era que no ibas a contestar?no tenes palabra viejito tonto
"No decir una palabra más al respecto", tiene como referencia los datos que tiré. Traducido: no doy más datos que ésos, lo cual no implica necesariamente que no conteste comentarios... entendés, bobito? o "nesesitás" que te lo siga explicando?
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