Hoy anduve por Parque Patricios, tomando un café con el amigo Carlos Carballo (ver). Obviamente que el tema central de la charla fue aquel que nos apasiona a ambos: Torino. Entre todas las anécdotas que surgieron (algunas se pueden contar, otras no), reapareció, inclusive, el viejo proyecto de remozar las historietas de Don Nicola (ver), con dibujos suyos y guiones míos, que espero algún día lleguemos a concretar.
Pero además, Carlos me hizo un valiosísimo obsequio: un pilón de Aquí Está!, que viene a sumarse a los ejemplares que ya tenía.
Como Hernán Schneider -poseedor de una colección de dicha revista mucho más vasta que la mía- ha tomado la posta de la publicación de Conventillo (y espero lo siga haciendo por largo tiempo -1- ), me limito a reproducir estos anuncios que encontré entre las Aquí Está! que hoy me regaló Carlos, y que aparecieron durante los años 1941, 1942 y 1943 (éste último, maravilloso), respectivamente.
Dan cuenta que las lecciones de dibujo de don Héctor datan de antes de lo que supuse, cuando trataba de ubicar temporalmente el hallazgo del cuaderno de uno de sus alumnos (ver).
Nótese, como curiosidad, que en la más antigua se promete a los alumnos la publicación de sus trabajos en Aquí Está! y en una revista “editada por los Estudios, que se distribuirá gratuitamente”. Si se llegó a cumplir o no... chi lo sa? De lo primero, quizá pueda informar Hernán, revisando su material. Lo segundo es más improbable. Quizá sí, alguno que otro agraciado, haya llegado a participar en Bicho Feo (que no era gratuita). Por lo pronto, en los ejemplares que poseo de este título se encuentran, junto a grandes firmas, autores desconocidos, de trazos primerizos.
Para finalizar, a las infinitas gracias a Carlos por los ejemplares, añado las correspondientes a estos datos adicionales.
Un lujo haber conocido gente como él, a través de este blog.
-1- ...de paso: me siento liberado de la vieja promesa de subir la segunda tanda de mis episodios de Conventillo, porque seguramente Hernán lo va hacer, y en forma más completa de lo que yo podía ofrecer, dado que mi material es discontinuo.
Pero mirá que bárbaro. Felicitaciones, Miguel!! Yo con los escaneos estoy arrivando recién a fines de 1940. Es un trabajo lento y ando con poco tiempo libre pero seguiré subiendo cronológicamente en el blog por mucho tiempo, así que quedate tranquilo. Si encuentro algo relacionado a la escuela de Torino, además de tus hallazgos, te aviso. Que disfrutes estas maravillas.
ResponderBorrarMuy bueno el ultimo aviso.
ResponderBorrarEl "collage" de personajes me trajo el recuerdo de la doble pagina que don Hector publicaba en las Desventuras de larguirucho bajo el nombre de "Torino Show".
Saludos
Gracias, Hernán. De todos modos, para retribuir tu trabajo, y no tirarme tan a chanta con los escanneos, prometo terminar de subir las lecciones de dibujo.
ResponderBorrarEn ese sentido, Eduardo, se podría asimilar a Torino con el Pi-Pío de Ferré. Ambos se lucían con estas composiciones abigarradas y multitudinarias.
La última propaganda es hermosa. Qué máquina de crear y de trabajar que era este hombre!
ResponderBorrarFelicitaciones por el material recibido, Miguel. Un acto de generosidad poco frecuente, en verdad.
Un abrazo.
Luis