COMPRA DE ALMAS A BAJO PRECIO

Hoy, en el cierre de su programa, Víctor Hugo Morales se refería a los que por un minuto de fama, se prestan a ser usados por el Grupo Clarín.
Tras cartón, me paso a Mitre, porque entre esbirros de Clarín prefiero a Tenembaum, que es bastante más mefistofélico que el gorila de Leuco, quien sucede -junto con Fernando Bravo- a Víctor Hugo en Continental, y cuya elementalidad ofende cualquier inteligencia.

El inefable “Ernestonchi”, en El Club de la Tarde, entrevistó, respecto a la figura de Osvaldo Papaleo, a uno de esos ansiosos de fama a cualquier precio que mencionaba Víctor Hugo. El propósito de Marcelo Larraquy (el escritor reporteado) era vender sus libros. El de Tenembaum, hacerle recitar que el cuñado de Graiver, López Rega y la Triple A, son la misma cosa. El otro se prestó con gusto.

Sin embargo, de su relato, sólo surge que Papaleo fue gerente artístico de Canal 7, donde levantó Buenas tardes, mucho gusto y el programa de Mirtha Legrand, lo cual es altamente plausible en ambos casos. Habría que felicitarlo por ahorrarle al televidente de entonces, desde el Estado, semejantes esperpentos.
Y que además Papaleo, después de que se fuera López Rega, fue designado Secretario de Prensa, y que desde ese cargo clausuró el diario La Opinión por golpista (Ernestonchi se apura a acotar que también por “subversivo”, según recuerda haber leído “alguna vez”). Y en efecto, La Opinión tuvo una actitud claramente golpista durante el período de Isabel, lo que no salvó a Jacobo Timerman de ser chupado y torturado. Yo también leí “alguna vez” ese diario.
En definitiva, el procedimiento es el de la falacia ad hominem, es decir, intentar rebatir un argumento mediante el ataque personal a quien lo formuló. Y son tan chambones, que ni siquiera la descalificación que pretenden resulta creíble, salvo para algún boludo que confía en cualquier basura que le venden.
Papaleo -aún no habiendo tenido los contactos con López Rega y la Triple A que mentirosamente se le adjudican- no es santo de mi devoción, por el solo hecho de haber sido funcionario del gobierno de Isabel Perón. Eso no quita que lo que diga sea veraz. Y en definitiva, en el asunto de Papel Prensa, siempre se ocupó de aclarar que él no participó de la negociación y que simplemente acompaña a su hermana en esta instancia, al tiempo que apoya el accionar de la Presidenta al respecto.
La segunda falacia, incansablemente repetida, consiste en condenar la supuesta recurrencia del Gobierno a la revisión del pasado. Intentan disimular así que el poder del Grupo Clarín no precluyó nunca. Por el contrario, se acrecentó enormemente desde la dictadura, llega hasta nuestros días y pesa sobre toda la sociedad.
Y finalmente, la falacia más atroz, se halla subyacente en el encare general del tema. Se podría traducir en que, al fin de cuentas, fue lo mismo el gobierno de Isabel que la dictadura, las organizaciones armadas -de derecha o de izquierda- que la represión ejercida desde el Estado. Nos dice sutilmente Ernestonchi: todo estuvo revuelto, todos estuvimos involucrados de una forma u otra... así que no conviene a nadie revolver mierda vieja.
Queda claro cuando, terminado el reportaje, un acólito de Tenembaum, remata con una frase ominosa: “Hay que aprender a mirar el pasado con un poquito de piedad, en todo sentido”. Lo mismo que dice la Iglesia cuando intenta el indulto de los represores.

El reportaje puede escucharse aquí.

Posdata: Aunque no tengo por que dar explicaciones, hago una aclaración para los que genuinamente se decepcionan al venir a leer sobre historieta, y se encuentran con notas de política. No es mi propósito convencer a nadie, tampoco ligar un subsidio para los blogueros K, como sugirió alguien. Lo prueba que, justamente, las ciento y pico de personas que visitan diariamente este blog, lo hacen para leer de historieta. Pasa que me interesa más escuchar Mitre que Nacional y ver TN que 6,7,8. De esa forma se aprende muchísimo sobre el manejo de los medios. Ahora, claro... la bronca residual la tengo que volcar en alguna parte, lo lamento.